El nuevo buque de combate litoral estadounidense USS Coronado presentó
"graves problemas" en las recientes pruebas a las que fue sometido, y no
pudo repeler adecuadamente los ataques de embarcaciones militares más
pequeñas, como los barcos iraníes con los que podría encontrarse en el
golfo Pérsico, informa Bloomberg.
Según un informe del Pentágono, en las maniobras el USS Coronado mostró
una serie de problemas sistémicos que no le permiten llevar a cabo
operaciones en condiciones de combate real. Las pequeñas embarcaciones
rivales fueron derrotadas en última instancia por el nuevo buque de la
Armada estadounidense, pero continuamente los barcos 'iraníes' se
acercaban peligrosamente a su talón de Aquiles.
"La incapacidad del Coronado de repeler esta, relativamente modesta,
amenaza en condiciones de ensayos, pone en duda su capacidad para hacer
frente a amenazas más serias", advirtió el director de pruebas del
Departamento de Defensa, Michael Gilmore.
Bloomberg resalta además la vulnerabilidad y fiabilidad que presentan
los nuevos buques de combate de la Armada estadounidense desarrollados
por Lockheed Martin Corp. y Austal Ltd. "Durante las maniobras en el USS
Coronado se descubrió una serie de problemas, en particular, problemas
de comunicación, con los generadores, aire acondicionado y deficiencias
de seguridad cibernética, que degradan significativamente la eficacia
operativa del Coronado", finaliza.
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