Contiene propiedades antiespasmódicas, por lo que se usa
para aliviar la flatulencia y las molestias estomacales. También
disminuye la tensión e induce el sueño. Estimula el apetito y la
producción de saliva y de bilis haciendo que la digestión sea más
efectiva. La albahaca también estimula los cilios en la nariz, con lo
cual ayuda a eliminar mucosidades y bacterias que pueden producir enfermedades en los conductos nasales. Su acción
terapéutica se debe a sus aceites esenciales, principalmente al
metilchavicol o estragol. La albahaca fresca contiene carotenoides y
ácido fólico. La Albahaca seca es una buena fuente de calcio, potasio y
hierro.
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