Lo que llamamos enfermedad, es solo un síntoma del desequilibrio al que hemos llevado nuestro cuerpo. Este tiene muchos mecanismos para solucionar las pegas a las que se ve sometida, excesos, insuficiencias, toxicidad,
etc. Nuestro estilo de vida actual se las ha ideado para bloquear esa
armonía, entorpeciendo nuestra capacidad natural de adaptación a las
dificultades.